La cotización de los Honda NSX se dispara año tras año, pero si hablamos de series de tirada más limitada del modelo, las cifras se multiplican todavía más. Una de las variantes de mayor cotización es el NSX Type R, que llevaba el modelo a un escalón superior en términos de radicalidad.
Por ello, cuando se desarrolló el NSX Type R se centraron fundamentalmente en la reducción de peso (sobre un modelo que ya de por sí, en la época, era muy ligero gracias a su monocasco en aluminio). Por ello, se prescindieron de todos aquellos elementos considerados innecesarios: sistema de sonido, rueda de repuesto, aire acondicionado, parte del equipamiento eléctrico, carenado inferior, material aislante e incluso dirección asistida. Además, la batería contaba con un menor tamaño y la luna trasera reducía su grosor. El resultado de todo esto es una reducción de peso de 120 kg en su conjunto.
También se complementaba con unos asientos Recaro con estructura en kevlar/carbono mientras que la suspensión contaba con un tarado más rigido, los amortiguadores pasaban a estar firmados por el especialista Showa, las llantas eran unas Enkei de nueva factura, algunos soportes pasaban a ser en aluminio y se incorporaban nuevas tomas de aire y emblemas Type R.
Su motor, eso sí, continuaba siendo el excelente V6 DOHC de 24 válvulas y 3 litros ocn 280 CV de potencia a 7.300 rpm y un par motor máximo de 285 Nm asociado a una caja de cambios de cinco velocidades que le permite alcanzar los 100 km/h desde parado en sólo 5 segundos con una velocidad máxima de 262 km/h.
Ahora ha salido a la venta una unidad del Honda NSX Type R que data de 1993. La empresa de Florida (EEUU) Speedart Motorsport que es quien se encarga de su venta nos cuenta su historia: su fabricación se llevó a cabo en Diciembre de 1992 y fue entregado en 1993 a su primer propietario, quien lo vendió en el año 2000. Pasó a manos de otro propietario (australiano) sin llegar a salir de su país natal (Japón), y fue este último cuando en 2016 lo vendió y fue exportado a Malasia. De ahí acabó en Reino Unido y posteriormente en los Estados Unidos.
Cuenta con 49.616 kilómetros y su estado de conservación es excelente. Aunque eso sí, necesitarás algo más de 252.000 euros al cambio actual de divisa (285.000 dólares) para poder hacerte con él…
