Después de que ayer todo el mundo creyese que General Motors había tumbado la futura producción de los modelos más radicales de sus filiales -entre ellos, el Camaro SS, el Corvette ZR-1 o el Cadillac CTS-V-, ahora el gigante norteamericano nos ha dado un respiro de los más agradable.
Ellos mismos han confirmado que el cierre de la división de alto rendimiento no afectará a estos modelos, por raro que parezca. Por tanto, la producción -concretamente- del Camaro SS dependerá de la decisión final que tomen los directivos, y no del cierre de la división de alto rendimiento.
¿Qué quiere decir todo esto, en otras palabras? Nada más lejo de la realidad, que los más grandes seguirán como hasta ahora. Si en un futuro se decide la producción de alguno de ellos por algún motivo en concreto, ya será otra historia.
Vía: Motor Authority
