McLaren ha concluido la producción del P1 al llegar a las 375 unidades producidas, a los que habría que sumar la producción de 13 prototipos experimentales, 5 prototipos de validación así como tres de pre-producción, que todos ellos, han recorrido 620.000 kilómetros. Es evidente que nos encontramos ante un modelo que a partir de estos momentos, su cotización no irá más que ir al alza, tanto por su limitada producción así como por el hecho de ser uno de los vehículos más avanzados tecnológicamente y rápidos que podemos encontrar actualmente para circular de forma legal por la vía pública.
Recordemos que estamos hablando de un superdeportivo híbrido dotado de un propulsor V8 twin-turbo asociado a dos motores eléctricos con una potencia de 916 CV que realiza el 0-100 km/h en 2,8 segundos y logra una velocidad máxima de 350 km/h.
La producción del modelo dio comienzo en verano de 2013, y dicha unidad número uno se fabricó en el color ‘Ice Silver’, mientras que por contra, la última unidad producida, la #375 cuenta con el color naranja perla. Sin embargo, ninguno de los dos ha sido el color más exitoso en el modelo, ya que ese mérito se lo ha atribuido el color Volcano Yellow.
Como podrás deducir, la media de tiempo dedicado a fabricar cada unidad es elevado, pero en parte se debe a la artesanía con la que cuenta cada una: concretamente, cada unidad necesita de unas 800 horas y 105 empleados implicados en su producción, es decir, unos 17 días por unidad. En algunos casos, el proceso de pintado ha llegado hasta cinco días, todo ello con el objetivo de buscar la máxima perfección en el acabado.
Eso sí, aún habrá otra variante del mismo que llegará próximamente aunque con un enfoque más radical y de producción mucho más limitada: se trata del P1 GTR del que sólo se producirán 35 unidades.