Al menos, eso ha afirmado después de conseguir salvar los muebles en la tercera ronda de clasificación y demostrar que a pesar de las circunstancias, el alemán está ahí.
Con una lluvia muy intensa que fue cesando poco a poco, Michael lo intentó a una vuelta con la idea de tener dos intentos, pero lamentablemente a la hora de ir a mejorar mucho más su tiempo en la segunda vuelta los neumáticos no aguantaron y se tuvo que conformar con una octava posición.
Michael también ha dejado claro que por sus actuaciones en las primeras rondas y previos entrenos libres, esperaba mucho más y que es el primero en estar decepcionado. No obstante, todo se verá mañana, y será hora de demostrar qué es lo que puede hacer desde posiciones medianamente competitivas, si no acaba siendo tocado en la salida.
Vía: GP Update