Después de mucho tiempo de espera, finalmente hemos de anunciar que la gama de SEAT se ampliará con un nuevo SUV, una noticia que a priori podría ser más que interesante pero que no deja de tener tintes bastante tristes, más aún si tenemos en cuenta que este nuevo modelo tiene todo lo necesario para que el Grupo VW envíe su producción a la fábrica que tienen en Kwasiny (República Checa) donde a día de hoy se fabrican los Skoda Yeti y Skoda Roomster.
Todo esto responde a la urgente necesidad que parecen tener en Volkswagen para hacer de SEAT una marca rentable. Para conseguir este fin, todo pasa directamente por elevar en todo lo posible el número de vehículos vendidos por la compañía española, una compañía que, según las directrices internas, debería conseguir vender nada menos que 500.000 unidades al año en 2018. Teniendo esto en cuenta y que en Volkswagen no están interesados en invertir desorbitadas cantidades de dinero en adaptar la fábrica de Martorell tenemos el cóctel perfecto para que el nuevo modelo de SEAT se fabrique fuera de España.
SEAT podría ampliar su gama de vehículos con un SUV que no se fabricaría en España
Según cuentan las malas lenguas, este nuevo SUV sería el último paso que daría un Grupo Volkswagen muy cansado a estas alturas de tener dentro del grupo a SEAT, compañía que no hace otra cosa que dar pérdidas, un «bolsillo roto» donde no hace más que invertir dinero y no ver como este da el resultado que esperan. Aun así, esperemos que, se fabrique donde se fabrique, este modelo haga que finalmente SEAT crezca como empresa y tome la relevancia que debería tener dentro del Grupo VW ya que esto ayudará a que la gama crezca aún más y España quizá se beneficie de la fabricación de nuevos vehículos lo que conlleva la creación de nuevos puestos de trabajo.
Vía: reuters