Con una excelente aceptación comercial, la segunda generación del SEAT León contaba en opción con la posibilidad de incorporar un kit de carrocería deportivo oficial con todas las ventajas que ello supone (fabricado en plástico y no en fibra, de excelente calidad, y además homologado para calle sin tener que hacer complejos papeleos), permitiendo de esta forma cambiarle la estética a una más deportiva sin necesidad de ir a las variantes o motorizaciones más altas de gama.
Nuevamente, SEAT repite fórmula. Sobre el nuevo León, ha incorporado la opción al catálogo de accesorios del kit de carrocería deportivo, que está disponible para las carrocerías de cinco puertas y de tres puertas (SC), es decir, que no estará disponible para la variante familiar (ST), que recordemos, es la primera vez que el León cuenta con una variante de este tipo.
Un precio desproporcionado para algunos elementos
El kit estético consta de un doble escape (580 euros), unas llantas específicas de 18 pulgadas (1.200 euros), alerón específico (480 euros), taloneras laterales (770 euros), paragolpes trasero específico (1.1160 euros) y paragolpes delantero (1.800 euros). El precio de todo el kit asciende a casi 6.000 euros, pero la ventaja es que como se pueden adquirir algunas piezas de forma opcional, nos permite renunciar a ciertos elementos a costa de obtener un precio final considerablemente inferior, en función de a lo que renunciemos.
Comparado con el León de segunda generación, donde su kit era mucho más llamativo y macarra, en esta ocasión se ha aprovechado por algo que podríamos tildarlo de ser más discreto, pero que en cualquier caso marca unas pautas claras respecto a un León en cualquiera de sus variantes no deportivas.