Aunque prácticamente desde su creación, el mercado principal de SEAT ha sido el patrio, estos últimos años han iniciado la expansión a otros muchos mercados donde están cosechando poco a poco buenos resultados, y eso está haciendo cambiar ciertos planteamientos dentro de la marca matriz para poder lograr ofrecer precios más atractivos a sus clientes de otros mercados, así como mayor beneficio por unidad vendida.
¿Cuáles son los planteamientos a los que nos referimos? La fabricación de sus modelos. Martorell es la principal fábrica y fuente de producción de la firma, apoyándose para algún modelo concreto y particular en otras fábricas que se designaban para tal fin. Pero la expansión de SEAT y el compromiso con los objetivos anuales de ventas pasa por difuminar su producción en otras fábricas del grupo que les permitan abastecer otros mercados.
Es por ello que en un mercado como el de Argelia, donde el pasado año para SEAT fue el sexto en importancia y en el que posee ya 26 concesionarios, situándose por delante de Italia, ha hecho a Volkswagen reformular la producción en medio de la reestructuración total del grupo. Y esto se ha materializado en la firma de un acuerdo con la empresa Sovac y Grupo Volkswagen para la producción de vehículos en Argelia, con una cadencia de producción diaria de 100 unidades de las marcas Volkswagen, SEAT, Skoda y Volkswagen Vehículos Comerciales. Allí se fabricarán unidades de la Volkswagen Caddy, Skoda Octavia y SEAT Ibiza, al menos, en primera instancia. Es decir, este movimiento atiende únicamente a los modelos más vendidos, dejando con la misma exportación a modelos como el Polo y León que allí tienen unas ventas más discretas.
Para SEAT, esta noticia afirman que ha sido motivo de alegría, algo que a priori nos puede resultar contraproducente, porque podemos tender a pensar que siempre será mejor que toda la producción se abarque en la fábrica desde la cual salen actualmente esos modelos. O que directamente se esté allanando el camino hacia una deslocalización de manual.
Pero nada hace pensar que sea así, de hecho, el motivo de alegría es doble: por una parte, a SEAT como marca le permitirá comercializar anualmente más unidades, pero por otra, incrementar la capacidad productiva de su factoría icónica. ¿Por qué? Porque gran parte del vehículo se continuará ensamblando en Martorell (Barcelona), realizándose su fase final de montaje en Argelia.
Así que no, contra todo pronóstico, no es motivo de preocupación, sino de todo lo contrario.