Vale, ahora ya tienes un reemplazo del Alpine A110 original en forma de una iteración moderna. Pero imaginemos por un momento que tienes ya una edad y recuerdas con mucho cariño el modelo original, o que en su defecto, eres amante de las viejas glorias y no acabas de ver con muy buenos ojos la carga tecnológica de la que se provisiona el modelo nuevo. En ese caso, te podemos ofrecer una alternativa que de seguro, te cautivará.
Se trata, nada menos, que de un Alpine A110 1600 S de competición acabado en color blanco (Blanc Gardenia) y cuyo primer propietario lo compró en su día nuevo en Palermo (Italia) en 1974. Tan sólo un año después, en el año 1975, corrió la emblemática Targa Florio, quedando en una posición 23 sobre la general y logrando un tercer puesto sobre su categoría.
Desde entonces, y sin saber muy bien por qué, se pasó los siguientes 25 años aparcado en un garaje. Ya en el año 2000, su propietario, debido a algunos problemas de salud con los que contaba, optó por vendérselo a su suegro. Este nuevo propietario se encargó de revitalizarlo por completo para reducir el impacto del tiempo sobre él: para ello, realizó todas las labores de mantenimiento pertinentes en caja de cambios, frenos, motor y embrague.
No ha cambiado de propietario desde entonces, y el suegro en cuestión lo ha ido conduciendo de manera muy ocasional en ciudad a fin de poder asegurar el correcto funcionamiento de todos los sistemas. Y para más inri, todavía conserva la jaula antivuelco original además del Pasaporte Técnico para Vehículos Históricos FIA (HTP) que le permite participar en competiciones de clásicos.
RM Sotheby’s es la casa encargada de gestionar la subasta que se llevará a cabo el día 7 de Febrero de la que se espera que su precio final pueda llegar a los 130.000-140.000 euros.