Poco nos queda ya del legado de Ford cuando se asociaba con Cosworth y sacaba coches de altas prestaciones para calle que quitaban el hipo. Precisamente, como ese legado es cada vez más escaso en el mercado de segunda mano, el aumento de precios en dichos modelos no ha cesado.
El Escort Cosworth fue un vehículo concebido para poder homologar el Escort para el Grupo A de rally, estando presente en el WRC hasta el año 1988. Aunque inicialmente había previsión de producir tan sólo 2.500 unidades debido a que era el mínimo exigido por la FIA, finalmente fueron algo más de 7000, en cuya primera iteración contaba con el 2 litros sobrealimentado de 227 CV con tracción a las cuatro ruedas y caja de cambios manual. Las últimas unidades contaban con el turbo Garrett T25 que reducía su potencia hasta los 217 CV, sin embargo, este cuenta con un T35.
Hace aproximadamente tres o cuatro años, los Ford Escort RS Cosworth comenzaron prácticamente a duplicar los precios en el mercado de segunda mano, situándose cerca de la franja de los 40.000 euros en nuestro país. Y todavía pueden superar dicha franja dependiendo del estado, kilometraje y si pertenece a una serie limitada como es el caso.
Esta unidad que hoy protagoniza el artículo y que sacará Silverstone Auctions a finales del mes que viene a subasta es un Ford Escort RS Cosworth Motorsport Edition de 1994, con el color de carrocería ‘Ash Black’ y un interior de tela gris que ha permanecido todos estos años a un coleccionista italiano (Colección Nespoli) y que se vendió a comienzos del presente año. Su odómetro tan sólo marca poco más de 9.000 kilómetros (y son reales tal y como lo certifican los libros de mantenimiento de la marca y facturas, no ha dado la vuelta el odómetro al contar únicamente con cinco cifras como los Ford de la época). Para que te hagas una idea, todavía monta los neumáticos Pirelli P Zero con los que salió de fábrica en su día.
Se espera que se paguen entre 61.000 y 68.000 euros por esta unidad, y tal y como está el mercado de unidades del modelo actualmente, podemos afirmar sin lugar a dudas que es un precio razonable.