Suzuki no plantea en ningún momento realizar una variante pick-up del Jimny. De hecho, no tendría mucho sentido tampoco, puesto que a precios ligeramente por encima podríamos encontrar ya pick-ups con una capacidad de carga muy superior a la que encontraríamos en el Jimny debido a su limitada batalla.
En cualquier caso, un concesionario Suzuki de Nueva Zelanda ha optado por transformar este pequeño todoterreno en un pick-up… y además, manteniendo la garantía oficial, lo cual es todavía más inusual si cabe.
No han optado por alargar el chasis, sino que básicamente lo que han hecho ha sido cortar la carrocería a partir del pilar B, adaptando una plataforma de carga detrás con paneles laterales desmontables y prescindiendo obviamente de las plazas traseras (y de su minúsculo maletero), además de recibir una zona de separación de la carga.
Esta plataforma de carga de la que le han dotado cuenta también con asideros laterales que facilitan que puedan subirse más fácilmente a la zona de carga para facilitar la carga de objetos en la misma. La unidad que se ha empleado para su transformación cuenta con el acbaado JX, que cuenta con llantas de acero en 15 pulgadas, faros antiniebla y luces diurnas LED.
Curiosamente, en su interior se ha pretendido darle un enfoque de herramienta de trabajo, por lo que se ha reemplazado su volante tapizado en cuero por uno de plástico además de optar por un equipo de sonido más austero.
El motor es el mismo 1.5 de 102 CV y 130 Nm de par motor con caja de cambios manual de cinco velocidades. Su precio es de casi 20.700 euros al cambio de divisa actual, si bien ellos pueden realizar la transformación previo pago de 6.500 euros.
