Tanto Motor Authority como Popular Mechanics lo avalan, y es que con las agresivas leyes anti-contaminación que se les viene encima a los fabricantes norteamericanos, es evidente que tienen que ponerse a investigar nuevas vías de desarrollo cuanto antes. En el caso de Chrysler, puede que tengan su solución personal más cerca de lo que pensamos.
En concreto, el presidente del fabricante Jim Press confirmó que con las nuevas regulaciones CAFE que tendrán como fecha límite de aplicación el año 2020, es muy posible que cada modelo tenga una variante híbrida e incluso -de forma hipotética- es posible que a finales de la próxima década todos los modelos de Chrysler sean híbridos. ¿Especular demasiado? Puede que sí, o puede que no.
Aunque quizás haya hablado más de la cuenta el presidente, lo cierto es que para bien o para mal, sus declaraciones no están muy lejos de la realidad. Son medidas drásticas que tendrán que adoptar y tarde o temprano una medida similar legará a todas las marcas. En el caso de Chrysler, que todos sus modelos sean híbridos en una década es factible, muy factible.
