Que el nuevo chasis del Audi A8 esté formado por un 58% de varios tipos de aluminio muestra con claridad y simplicidad la implicación que tiene la marca de Ingolstadt con el desarrollo y fundamento estructural del buque insignia alemán por excelencia. Y es que el nuevo Audi A8 está destinado a durar prácticamente diez años a la venta, y visto de esta manera, no es de extrañar que en Audi quieran hacer los deberes de la mejor forma posible, aunque esto incluya una puesta en el mercado ligeramente más tardía que la de sus rivales.
El chasis Audi Space Frame se compone como un «mix» de aleaciones ligeras y materiales que se conjugan para otorgar un chasis enormemente más rígido que el A8 que reemplazará. Y al contrario de lo que pudimos ver en informaciones pasadas y rumores, según Audi el peso neto del A8 también se reducirá a pesar de que la rigidez será claramente superior. Para ello, encontraremos en el chasis una pequeña porción de acero convencional, magnesio, diversos tipos de aluminio… todo ello para dar cabida a una nueva generación de motores que seguirán en la línea del chasis: muy modernos, eficientes, y también más ligeros.
El nuevo Audi A8 hará una primera aparición pública en el Salón del Automóvil de Fráncfort durante el próximo mes de septiembre. Será en el salón alemán donde Audi tire de la manta y aunque sí es cierto que puede que lo veamos poco antes en imágenes oficiales a través de Internet, no tendremos que esperar mucho más para que debute en las calles. Antes de fin de año ya estará rodando.
