Hasta hace pocos años, pensar en Kia de propulsión trasera y con un enfoque deportivo era algo prácticamente utópico. Pero el paulatino desplazamiento que quieren realizar hacia las marcas premium, pasa también por tener que ofrecer características que habitualmente podemos encontrar en ellas, como es la propulsión trasera.
Y… de ahí nace el Stinger. Uno de los modelos más espectaculares que ha presentado Kia para calle hasta la fecha, ya que se trata de una berlina con estilo coupé de cinco puertas y cinco plazas, con motores en su gama que incluyen un gasolina de 2 litros y 256 CV y un V6 de 3.3 litros con doble sobrealimentación y 375 CV con el que sólo necesitará 4,9 segundos para alcanzar los 100 km/h, así como un diésel de 2.2 litros fundamentalmente para el mercado europeo, estando todos ellos acoplados a una caja de cambios automática de convertidor de par y ocho relaciones.
Con propulsión trasera (¡autoblocado!) y tracción a las cuatro ruedas, el Stinger es sin duda un arma de doble filo con la que poder iniciar un acercamiento a los intocables modelos alemanes ofreciendo virtudes como un precio más accesible y un estilo diferente.
Y claro, con dos características como son la propulsión trasera y el autoblocante, resulta difícil para enfermos del motor como nosotros no imaginarse al Stinger de lado. Alguien ya lo ha llevado a cabo, y se lo ha pasado en grande haciendo donuts y derrapajes controlados en un circuito cerrado. No es desde luego el coche más idóneo para llevar a cabo ese tipo de acciones, pero desde luego, divertido tiene pinta de ser un rato.
