Hace solo unas semanas que en MotorAdictos te pusimos alerta: Volkswagen está trabajando en una versión limitada de su hatchback preferido y se alzará como el compacto más potente y rápido jamás fabricado por la marca alemana. El Volkswagen Golf R400 será una realidad, y estará posicionado como la cúspide del actual Golf de séptima generación.
A estas alturas, el Golf R400 no necesita explicación. Presentado años atrás como un prototipo, la idea inicial constituye un hatchback con motor de 5 cilindros y 2.5 litros de cilindrada similar al presente en modelos como el Audi RS3 Sportback, y obviamente otorgando una potencia neta en el mismo marge. De hecho, se especula con una posible potencia final de hasta 420 caballos, frente a los 400 que portaba el prototipo inicial y que de por sí, marcan una gran diferencia con el Golf R.
Es interesante recalcar que el Golf R400 fue desechado en un principio por el escándalo dieselgate de Volkswagen, en una necesidad importante de canalizar costes y centrarse en el desarrollo y puesta en el mercado de modelos más eficientes y de mayor volumen de ventas para paliar todo lo acontecido por entonces. Ahora que las aguas han vuelto casi en su totalidad a su cauce, y con la octava generación del Golf prevista para finales del próximo año 2019, el Golf R400 tendrá que ser ahora o nunca.
Con una presentación que podría acontecer en los próximos meses, no parece factible que lo vayamos a ver como un modelo estándar en la próxima vida útil del compacto. El Golf R seguirá siendo la piedra angular de la gama de motorizaciones -recibiendo además, más potencia- mientras que el R400 se constituirá como una edición limitada solo para unos pocos. Las similitudes con el RS3 Sportback de Audi, y la cercanía en prestaciones, podría ser un impedimento para la marca de los cuatro aros.
