La pick-up de Volkswagen se ha actualizado introduciendo numerosos cambios, aunque quizá los más destacables sean los del plano mecánico, pero también el bisturí se ha aplicado sobre algunas partes de su exterior para actualizarlo y ponerlo al día.
Empecemos en primer lugar por esto último: los paragolpes delantero y trasero son de nueva factura, llantas de aleación de hasta 20 pulgadas, también lo son los nuevos faros delanteros y pilotos traseros con el fondo lumínico diferente, así como una parrilla remozada. Y aunque por el momento no hay imágenes reales de su habitáculo, también en los bocetos se aprecian cambios que afectan al cuadro de mandos, nuevas tapicerías con más colores, una consola central rediseñada o incluso un volante con nuevo diseño. No descartamos tampoco que incluya mejoras en su sistema de infoentretenimiento aprovechando el lavado de cara. El revestimento de la zona de carga también se ha mejorado introduciendo materiales de mayor calidad.
Por su parte, el apartado mecánico hace gala del V6 de 3 litros turbodiésel con potencias de 163, 204 y 224 CV y que puede ir asociado a una caja de cambios manual o una automática de ocho velocidades, así como un sistema de tracción simple (propulsión) o total 4MOTION con transmisión integral permanente por Torsen o 4MOTION con eje delantero conectable. En cualquier caso, genera 550 Nm de par máximo desde las 1.500 vueltas, siendo un importante avance en su respuesta al acelerador frente a las opciones con el 2.0 TDI que se ofertaban hasta la fecha.
Este bloque V6 cumple con la normativa Euro 6 y con el cambio automático de ocho relaciones homologa 7,6l/100 km con unas emisiones de 199 g/km. ¡Ah! Por último, como novedad, ahora de serie en Europa incluye la dirección Servotronic.
Su comercialización arrancará a partir del mes de Septiembre.