Ya te lo anunciamos hace algún tiempo: este año, uno de los compactos más emblemáticos de todos los tiempos y uno de los referentes de su segmento, el Volkswagen Golf, cumple 40 años. ¿Y cómo lo quieren celebrar? Entre otras cosas, con un prototipo que han presentado en el Salón de Pekín de 2014 para conmemorar el aniversario.
Por ello, ha realizado una serie de cambios tanto en su exterior (donde pasan más desapercibidos), así como en su habitáculo, donde son mucho más patentes a simple vista. El principal objetivo de estos cambios es llamar la atención, sin llegar a entrar en estridencias, dando un aspecto más premium y diferenciador respecto a los habitáculos de Golf que acostumbramos a ver en la mayoría de versiones que podamos cruzarnos por la calle.
Empecemos por su exterior: en primer lugar, se incorporan unas carcasas de los retrovisores de color «cromo mate», además de un emblema identificativo de esta versión que conmemora los 40 años en los pilares B exteriores. Las llantas son de 19 pulgadas de diámetro (modelo «Madrid») y cuenta con un color exterior específico denominado ??Magic Morning?? terminado con un lacado dorado que se puede apreciar desde algunos ángulos.
En su habitáculo se ha optado por una tapicería bitono, donde el centro de los asientos cuentan con unas costuras en forma de rombos y que se extienden también a la fila de asientos posterior. Otros detalles dignos de mención son los paneles de puerta iluminados, pedalier en aluminio, inserciones de madera en el salpicadero o el acabado piano en las salidas de aire.