Que el TSI de Volkswagen ha sido todo un ajuste de tecnologías no es ningún secreto, fue el año pasado el sucesor de los ya conocidos FSI y hoy día se vuelve a presentar con lo mismo, buenas prestaciones, poco consumo, y elevadísima eficacia.
Según fuentes, se iba a suprimir el turbo, pero parece ser que se mantendrá la línea del anterior y seguirá llevando el turbo más el compresor, el arma más fuerte que ha tenido esta pequeña gama de motores Volkswagen. Junto con la inyección directa FSI, esta nueva generación consigue 200Nm de par a tan sólo 1.500 revoluciones, ¿Asombroso? Teniendo en cuenta la escasa dimensión del 1.4 litros, sí que lo es.
Como dato, también se renovará el cambio DSG, con un añadido muy importante que hará evitar un resto en la eficacia; hablamos de la supresión del baño de aceite de los embragues. Aparte, contará con 7 velocidades y la podremos ver -junto con el motor- en el próximo Volkswagen Polo, este mismo año.
Vía: Motor Authority
