Volkswagen tiene casi a punto la nueva generación del Volkswagen Golf -octava, para ser más exactos-, y que debería presentarse en torno al mes de Octubre (estaba prevista su presentación en el Salón de Fráncfort, pero finalmente un retraso truncó los planes de la compañía). Actualmente el fabricante está ultimando todas las pruebas que está llevando sobre unidades de pre-producción previo a su comercialización, y por ello nos ha deleitado con una imagen del modelo camuflado.
Nada que en cualquier caso nos deba sorprender, puesto que ya lo pudimos ver en todo su esplendor hace no mucho tiempo en unas imágenes espía. Eso sí, no deja de ser cuanto menos hipnótico el camuflaje con el que cuenta, que además, cuenta con la palabra «Golf» embutida dentro del mismo camuflaje.
Volkswagen define al nuevo Golf como un modelo de elegantes proporciones y el director de diseño de Volkswagen, Klaus Bischoff afirma que será un coche genuinamente atractivo. La fórmula estética será ya conocida por todos: una evolución muy conservadora que no rompe moldes y que por ello trata de contentar al mayor número de público posible.
Donde sí que habrá una verdadera revolución será en su habitáculo, donde pasará a adaptar un salpicadero conformado por dos pantallas de gran tamaño donde se fusiona la instrumentación con la pantalla de infoentretenimiento (como sucede, por ejemplo, en los nuevos Mercedes con el sistema MBUX), prescindirá de múltiples botones físicos (haciéndolo mucho más simple) y además contará con un nuevo volante multifunción. Todo ello, complementado con una gran carga tecnológica en materia de conectividad (que aparentemente, ha sido la responsable de su retraso).
Eso sí, en esta nueva iteración, no esperes ni carrocería de tres puertas, ni una versión 100% eléctrica del modelo (para esto ya estará la gama ID), aunque sí que llegará un híbrido enchufable acompañando a una gama de propulsores de tres y cuatro cilindros gasolina, diésel y CNG. Todo ello sobre la plataforma MQB Evo que permitirá un ahorro de 45 kg respecto a la generación a la que sustituye.
Ese camuflaje no disimula ni sus formas ni su fealdad. Estoy seguro de que a nivel de calidades interiores estará en la cima, pero por lo demás será lo de cada generación: diseños anodinos, precios desorbitados y fiabilidad por debajo de la competencia (como mínimo de la japonesa y coreana) Por suerte en España y otros paises hay mucho fanático de la marca y VW lo sabe.