Volvo hace oficial el lavado de cara para el C30, un modelo únicamente disponible en carrocería de 3 puertas y que cuenta con un diseño muy particular. Los cambios son múltiples, especialmente en el apartado estético, del que pasaremos a hablar a continuación.
Su frontal recibe una gran remodelación, adoptando unos faros similares a los del S40 y V50, junto con una parrilla heredada del XC60. Esto implica un paragolpes completamente nuevo, aletas, entre otros. Lo cierto es que su frontal gana bastantes enteros con este lavado de cara, con un aspecto ahora más desenfadado y deportivo. También se añade un nuevo color a la gama de colores denominado Orange Flame (haciendo un total de 13 colores disponibles en la gama) y que se puede observar en las imágenes. Las molduras de la carrocería ahora pueden ir pintadas en hasta cinco colores.
La gama de motores se mantiene invariable, con los diésel 1.6D DRIVe de 109 CV, 1.6D DRIVe start/stop de 109 CV, 2.0D de 136 CV y 2.4 D5 de 180 CV. En gasolina, nos encontramos una gama también variada: 1.6 de 100 CV, 2.0 de 145 CV, 2.0F (Flexifuel) de 145 CV, 2.4i de 170 CV y 2.5 T5 de 230 CV. En función del motor, van asociados caja manual de cinco o seis velocidades, pudiendo acoplarse en opción una caja automática de cinco relaciones para los gasolina de cinco cilindros, mientras que los diésel de 2 litros pueden asociarse en opción a una caja Powershift de seis velocidades.
Además, se añade un kit deportivo para el chasis, que estará disponible para toda la gama de motores -a excepción del 1.6d DRIVe- y que se compone de estabilizadoras más gruesas, dirección menos desmultiplicada -más rápida y directa-, así como unos tarados más secos en la suspensión (un 30% más).
Vía: Volvo
