Hace sólo unos días, la firma sueca presentó junto con su preparador oficial el nuevo Volvo S60 Polestar, un prototipo postulado como una posibilidad de producción en masa y que se traduce ni más ni menos, como la alternativa sueca por excelencia al Mercedes C 63 AMG y al BMW M3 tal y como lo conocemos.
Antes de nada, situémonos… este prototipo cuenta con un propulsor turboalimentado que rinde una potencia neta de 515 caballos y 575 nm de par, cifras bestiales teniendo en cuenta que supera ampliamente las cifras de sus rivales más cercanos, y Volvo consigue sacar el máximo partido de cada una de dichas cifras. Para que te hagas una idea, su 0 a 100 kilómetros por hora es de 3.9 segundos, una décima más lento que el Ferrari 458 Italia.
Hoy hemos conocido que Volvo y Polestar han vendido este «one-off» por casi 240.000 euros, una cifra astronómica que pone sobre la mesa la magnitud de este prototipo. Si bien es cierto que Volvo no ha confirmado si habrá más unidades construidas, de por sí el S60 Polestar es ya una leyenda contemporánea de la firma sueca.
