Hasta Singapur nos hemos tenido que ir para recuperar los pajaritos que Fernando Alonso se dejó en Monza del año pasado. Ayer veíamos durante la sesión de clasificación cómo el R28 dejaba tiradas en una escapatoria las ilusiones de Fernando Alonso, que no eran pocas viendo el ritmo tan bueno que estaba teniendo el monoplaza a lo largo de todo el fin de semana. Y está claro que ese ritmo no era por casualidad. Tenía coche para esta carrera, tenía su talento y ahora sólo le faltaba una carrera loca para intentar hacer algo con su 15ª posición. El milagro llegó en forma de Nelson Piquet. A veces las victorias cuestan sacrificios. Un accidente del piloto brasileño hizo que el Safety Car rodara por primera vez en el Gran Premio y permitió a Fernando Alonso mantenerse en una posición muy buena arriba, pues fue el primero en parar y además lo hizo pensando en realizar tan sólo una parada más, luego estaba con una estrategia de dos paradas, en el momento indicado, en el lugar idóneo. El milagro ya se había obrado… ahora él tenía que aprovecharlo. Y vaya si lo ha hecho.
Hoy no ha sacado petróleo del R28, ha sacado incluso más. Ha conseguido hacer tiempos de los coches de la cabeza, y es que quizá sea verdad que el R28 pasito a pasito ha ido mejorando y acercándose a los BMW Sauber. Sin duda, una victoria inesperada, en una temporada muy difícil y que le habrá tenido que saber a gloria a Fernando, tanto como a los que la hemos disfrutado. En «esta» noche, han vuelto los pajaritos.
Y AHORA…………..¿DARAN UN GOLPE DE DIRECCION EN FERRARI O ES QUE ES POCO PERDERLO TODO EL ESFUERZO DE UN A�?O EN UNA SOLA CARRERA?
ESTOY SEGURO QUE YA ESTAN REDACTANDO EL CONTRATO DE ALONSO.
UN SALUDO RB.