La versión más juguetona y divertida del Volkswagen Polo ha iniciado su comercialización, en concreto, hablamos del Volkswagen Polo GTI 2018. En esta nueva generación, el modelo alcanza los 200 CV de potencia extraídos de su motor de 2 litros con posibilidad de montar tanto una caja de cambios manual de seis velocidades como una DSG de doble embrague.
Esos 200 CV los entrega entre las 4.400 y 6.000 revoluciones por minuto, mientras que su par máximo es de 320 Nm a 1.500 vueltas. Necesita de 6,7 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado, mientras que su velocidad máxima es de 237 km/h. El consumo homologado, por su parte, se sitúa en los 5,9 litros por cada 100 kilómetros. Todos estos registros corresponden a la caja de cambios DSG de doble embrague, que es como logra las mejores cifras.
¿Qué otras diferencias tiene respecto a un Polo convencional?
Además del potente propulsor, el Polo también cuenta con numerosas diferencias a nivel estético y de puesta a punto. Entre otras cosas, su suspensión está rebajada 15mm, y en caso de que optemos por el chasis Sport Select, contaremos con amortiguadores adaptativos con cuatro niveles de funcionamiento: Normal, Sport, Eco e Individual. Aunque no cuenta con diferencial autoblocante mecánico, sí que tiene un diferencial electrónico XDS como el que enocntramos en otros modelos de Volkswagen.
Su exterior cuenta con paragolpes específico, banda de color rojo en la parrilla delantera, llantas de aleación de 17 pulgadas (18 en opción por 450 euros), pinzas de color rojo, mientras que en su habitáculo, la característica más llamativa es la tapicería de cuadros habitual de los GTI sobre sus asientos envolventes, además de la instrumentación digital (Volkswagen Digital Cockpit) que viene de serie en esta variante.
Su precio, sin campañas ni descuentos, es de 25.090 euros sin campañas (23.200 euros con campañas). Eso sí, el precio corresponde a la versión con cambio DSG, todavía tendremos que esperar para optar al cambio manual. En cualquier caso, es un precio inferior al DS3 Performance, MINI Cooper S 5 puertas, aunque más caro que por ejemplo un Renault Clio R.S.